El 28 de noviembre de 1991 Nirvana grabó una actuación para el mítico programa de televisión de la BBC Top of the Pops en Londres, en la cual los ejecutivos le pidieron tocar específicamente Smells like ten Spirit, pero cón playback, Cobain hizo todo lo contrario y empezó a hacer balbuceos en el micrófono y parodiándose a si mismo, la actuación fue una burla total a los directivos y se volvió de culto, que empezaba a conocer a Kurt y su desmedida forma de ser.